Lluís varios Lluís: DISTINTOS ORIZONTES CON DIFERENTES FORMAS Y PIEZAS EN LA CAZA MENOR

Man - Made Hole (Sudáfrica)

Hoy en día vivimos en un mundo globalizado, donde desplazarse a cientos o miles de kilómetros, no representa un gran incomveniente para el viajero, contando ademas, por via aérea con el low cost y en tiempo record, incluso en el tema burocrático que a pesar de todo aún sigue siendo de los mas lentos y atrasados.

Qualquier empresa de cualquier sector un poco importante tiene hoy día representación, en distintos países del mundo y como no, el sector cinegetico, también está presente en buena parte de la geografía mundial.

Estas orgánicas de caza, controlan, organizan y planean todo desde la salida de una ciudad importante, viajes, estancias en hotel, acompañamiento al cazador durante la cacería, servicio de cartuchería o armas, pisteros, porteadores y catering, en caso necesario, con viaje de vuelta incluido.

Antiguamente, un safari consistía en una cacería de grandes animales africanos, pero hoy en día tiene otras aplicaciones tales como: la propia caza de grandes animales, el safari fotográfico, cada vez con mas adeptos, de todos los animales en vivo a través de vehiculos todo terreno en su propia área de vida en libertad, algo muy diferente y por consiguiente mas peligroso, que fotografiarlos en parques cerrados o zoos y también como navegador de internet, pero su verdadero significado es (hacer un viaje a pie).

Acabada la actividad cinegetica en la península, tenemos otras opciones para practicar la caza en otros continentes como por ejemplo el africano, lleno de vida por todas partes, y aunque casi siempre la caza en África se asocia a la mayor, será de la menor y muy atractiva de la que vamos a tratar.

En ese caso el lugar elegido es Sudáfrica. Guinea, o Senegal tal vez puedan ser buenos destinos, para pasar unos inolvidables días de caza tras las pintadas o gallinas de Guinea, francolines de swainson , gangas, palomas , tórtolas, patos, incluso podría sorprender algún conejo. Sudáfrica es uno de los países mas ricos en fauna salvaje, cuenta con infinidad de especies y subespecies, tanto en cantidad como en variedad.

Cañón rìo Blide, 26 kiló. exten. 800 metr. altur, (Sudáfrica)

Uno de los grandes atractivos de este país es la gran planicie que nunca tiene fin, su tierra rojiza con grandes hormigueros y su vegetación: hierva, acacias, matorral, arboles, alguna charca de agua salpicado con algún campo de cultivo o ganado, que se alimenta con el pasto del mismo, cerca de algún poblado.

Hoy en día buena parte de esas llanuras, se han convertido en parques o reservas, donde suelen tener lugar los comentados safaris fotográficos, no exentos de algún peligro, ademas alojan a la mayor parte de los cazadores furtivos, siendo muy difícil erradicarlos, dada la densidad de vegetación en algunas de estas zonas.

Pero sin lugar a dudas, la reina de la caza menor en sudáfrica es la gallina de Guinea, con un peso aproximado de kilo y medio en adultos, algunos pensaran que al ser un ave tan pesada su vuelo será lento pues nada mas lejos, es un ave ligera con vuelo rápido, escurridiza, astuta y apeona a gran velocidad, por lo que no es fácil llegar asta ellas

Dada la abundancia de estas aves en la zona, la munición deberá estar acorde con su peso, aunque una vez metidos en la cacería, saldrán por delante francolines y otras especies, que se tiraran con el mismo cartucho, por lo cual no sería nada descabellado, utilizar un choque cerrado de una * o dos ** y perdigón de sexta o de quinta y 36 gramos en escopetas saut, ademas de otras posibilidades en superpuestas y yuxtapuestas o planas, al llevar dos cañones.

Cabeza peculiar de gallina de Guinea macho

Normalmente estas caceras se hacen formando una linea alternada entre cazadores, pisteros que se encargan de llevar las piezas abatidas y el profesional o orgánico que supervisa todo cuanto acontece, entre todos miran donde caen y cobran las piezas abatidas, aunque en ocasiones los cazadores también llevan a sus auxiliares los perros para el cobro de piezas.

Las gangas se suelen cazar por la tarde entre dos luces, cuando se dirigen a los bebederos a saciar su sed o al revolotear sobre ellos.

El coste de estas cacerías puede variar mucho según numero de cazadores en la partida, que en este caso podría costar aproximadamente 2000 euros o unos 1650 por persona y semana, en caso de llegar a unos 10 cazadores. Algunas veces la cartuchería y el alcohol suponen un plus extra en el coste.

Pero lo que si es seguro es que todos regresaran contentos por haber participado en una nueva experiencia, tanto a nivel de forma de cazar, conocer y tirar nuevas piezas de caza o disfrutar del panorama paisajístico sudafricano.

Solo algunas de las muchas aves que pueden cazarse en Sudáfrica y que además gozan de una buena salud poblacional.
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