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| de las que estuve es la que hacen mejor las cosas "casa España" |
En estos últimos años, somos muchos los cazadores que, por la escasez cada día mas pronunciada de la caza menor, ademas de la falta de gestión, que incluso debería ser obligatoria, y el aumento de la caza mayor, en especial del jabalí, los cazadores hemos optado por compartir nuestros días de caza, entre la menor y la mayor, dedicándonos a la mayor como la principal, al entrar a cierta edad o por alguna causa física que nos impide andar con soltura.
Como es lógico y necesario, en los cotos sociales de mayor hay un presidente y un secretario, ademas de alguna otra persona que ayuda, los cuales conforman una "junta", ellos deciden las manchas a cazar, organizan la cacería y procuran que todo se desarrolle según lo previsto, siempre en contacto con perreros y postores que dejan a cada uno en su parada, hasta formar las armadas que cada uno tiene asignada, cerrando así la mancha o manchas a batir.
Las balas, por tratarse de una munición potente, de largo alcance y peligrosa, la administración dicta unas normas, sobre el uso de las mismas que a Dios gracias todo el mundo suele acatar; me refiero, por ejemplo, a enterrar las balas, no tirar a los visos, no salir de la parada, etc.., normas que todo cazador de mayor debe saber y respetar, para contribuir al buen desarrollo de una montería, sin incidentes que puedan causar males mayores.
Como ya hice referencia en otro post, es en las propias collas de mayor, donde no se respeta ninguna norma interna, quizá porque los presidentes o la junta de las mismas no las observan como necesarias, o simplemente para evitar discusiones.Sólo en alguna colla de las que e estado, respetan alguna de ellas.
El desmadre que se forma en la adjudicación de los puestos o paradas es horrible, hasta el momento de la salida muchos de nosotros no sabemos ni siquiera donde vamos a ir cuando algunos listos ya se encuentran en sus posturas, que son las mejores, ya sea en una parte del coto o en otra. Estos señores siempre van a su parada, es una falta de orden total y premeditada, ademas de mucha jeta por parte de los mismos, que a final de temporada se vanaglorian de los buenos resultados que han obtenido en la
temporada de caza.
Por lo que he podido observar en estos últimos años, en casi todas las collas ocurre lo mismo, son personas que viven o frecuentan a menudo el coto, llevan años cazando en el mismo y son sabedores de lo que ocurre en cada momento, por lo que los demás vamos de bulto, por si alguna res con la presión de los perros, sale por donde no debe y le damos gracias al señor por la aparición o abate de la misma.
El pasado sábado día 4 de octubre acudí a una cacería de jabalí, cerca de Montserrat y tanto de lo mismo, hay algo que me sorprendió y nunca me había ocurrido, me explicaré; salimos del punto de partida hacia los puestos a ocupar, el postor delante y 4 coches mas detrás, al llegar a destino el postor hizo la intención de reparto de puestos; de pronto salieron 3 o 4 cazadores, no recuerdo bien, encarándose de malos modos y gritando al postor, argumentando que aquellos puestos ya los cubrían ellos y que nos largáramos de allí. El mismo postor nos contó que aquellas paradas las ocupaban siempre estos individuos y que nadie nunca podía estar allí, al estar situadas casi en el centro de la batida, salvo algunos disparos lejanos; ellos fueron los únicos que dispararon, 16 tiros, abatiendo 2 jabalíes.
Lo que yo me pregunto es cómo pueden ocurrir estas barbaridades. Si los jefes de colla o el presidente se pusieran en su sitio e hicieran las cosas un poco más ordenadas que es como debe ser, no le harían perder la afición a uno. Cuando años atrás se crearon estos cotos, fué para facilitar la caza en régimen de igualdad de oportunidades y conseguir unos precios más asequibles.
Todos sabemos lo fácil que sería hacer las cosas bien, simplemente con algo tan fácil como marcar los puestos; es valida una cruz, una x, un cerco o cualquier señal pintada en una piedra, un pino o una pared, para saber que allí esta ubicada una parada y en segundo lugar, antes de salir de la sede o punto de reunión, todos los cazadores debieran, bajo sorteo, tener su numero. Luego es cosa de los postores llevarse las armadas; da lo mismo de 4, de 5, o de 7 cazadores según necesidad del terreno a montear; eso sí, colocando por orden numérico su armada.
Otro punto importante en esas collas es el reparto de carne. Para hacerlo correctamente se deben formar grupos de entre 4 y 6 socios, que estarán en una lista empezando por el grupo 1-2-3-4-5 etc. con sus nombres, e ir rotando, según vayan cogiendo carne, el cabeza de cuadrilla, se anotará por orden los guarros que se vayan cobrando en la batida, de forma que si al final se han cobrado 2 guarros, el primero que se mató corresponderá al grupo 1 y el segundo al grupo 2, y el próximo día de caza, empezará a repartir el grupo numero 3 y así sucesivamente, es una excelente forma para que no haya discusiones, si vosotros habéis cogido el grande o el pequeño o el mediano, ademas cada grupo se llevará la carne toda del mismo guarro. Las muestras de la carne a analizar, se hará de la misma forma: cada grupo pondrá su muestra en un bote a tal efecto, con el numero de grupo que tenga en el listado impreso en la tapa del bote. Parece muy complicado pero es de lo mas sencillo y ordenado, Naturalmente, cada grupo se encargará de despiezar el animal que les corresponda.
Esta formula, por una parte evita mezclar carnes de piezas más duras con otras mucho más tiernas, algo que se nota en la cocina y aun mas en el plato.y por otra parte evitamos que si un día nos sale un jabalí malo, evitaremos desechar los demás que en ocasiones pueden ser varios, ademas del trabajo que ello conlleva (me refiero al trabajo de desollarlos).
Ya se que este escrito en un blog tan humilde como es el mío no puede tener repercusión, pero me veo en la necesidad de divulgarlo por si un día alguien se da cuenta, que haciendo las cosas bien habrá más y mejores aficionados, en vez de aburrirlos y perderlos, en pro de 4 sujetos privilegiados.
Aquí les dejo un enlace a través de CLUB de CAZA
INFLUENCIA DE PLAGUICIDAS EN NUESTRAS ESPECIES
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