domingo, 18 de septiembre de 2016

EL FUEGO: EL PEOR ENEMIGO DE LA FAUNA Y LA FLORA

viviendas en peligro por el fuego

Desde hace años, y en parte debido al cambio climático, estamos padeciendo fuertes trastornos en la climatología y uno de ellos es el aumento paulatino de la temperatura estival, lo cual facilita la posibilidad de los incendios forestales, si a ello le añadimos las fuertes sequías que venimos padeciendo desde hace varios años, tenemos todas las papeletas para que estos incendios sean cada vez más numerosos, extensos y difíciles de parar, ocasionando graves problemas, pérdidas de distinta índole, bienes materiales, documentos, muebles, problemas de alumbrado, animales asfixiados etc, en viviendas situadas en pleno monte o urbanizaciones incluso a las afueras de los pueblos, también aun más lamentable es la muerte de alguna persona así como algún bombero o participante en la extinción de un incendio.


avioneta esparciendo agua sobre el fuego

Podríamos decir que son muchos los factores que pueden ocasionar un incendio en verano y a altas temperaturas, un cristal entre el forraje seco, la chispa de un cable de iluminación, la chispa de una maquina faenando en el campo, un cigarrillo lanzado sin apagar etc, pero sin embargo esto sucede en contadas ocasiones, en el 99 % de los casos los incendios están siempre provocados por la mano del hombre, si bien es verdad que en algunas ocasiones un fuego puede transformar un terreno para después prepararlo para laboreo, son mínimas las ocasiones que ocurre esto, total, que la mayor parte de fuegos en el monte están provocados por pirómanos, gente que disfruta como locos, y nunca mejor dicho, con esos espectáculos de fuego que tanto daño hacen y que tanto cuesta recuperar, las pruebas que dejan en los inicios del incendio son lo suficientemente evidentes y creíbles para acusar a estos individuos. Me contaba una vez un mozo de escuadra, al tiempo que obserbavamos un incendio a la distancia recién encendido y decirle que había salido un coche de color tal y ciertas características del lugar de los hechos, que ya sabían quienes eran pero no podían hacer nada sin pillarlos con las manos en la masa.
monte y tractor calcinados por el fuego

Pues bien, yo me pregunto: A pesar de la magnitud de esos problemas que acaban destrozando el medio natural, de tantos años y que tanto ha costado cuidar y mantener, además de elevadísimos costes ¿son suficientes las actuaciones gubernamentales sobre el tema?, ¿Porque no persiguen a estos pirómanos con todo el peso de la ley?, parece como si ya les estuviera bien las cosas como están, a saber si esto también les proporciona intereses o simplemente piensan que muerto el fuego se acabo la rabia y a otra cosa mariposa, después de ver lo que ocurre con la corrupción, formar gobierno etc, ya no me extraña nada, nunca habría pensado que los políticos de hoy día solo pensaran en su hamaca y el dinero sin importarles lo que le ocurre al pueblo que tan bien les pagan casi sin protestas y si un día protestan por algo, la primera amenaza pasa por los tribunales directamente ¡dictadores!
res muerta atrapada por el incendio

Otro punto a resolver: cuando se quema un monte, nunca he visto a ningún grupo de
ecologistas o animalistas luchando para sofocar un fuego, es que en momentos como estos dejan de ser activistas¿no os importan los animales que mueren chamuscados? ¡que finos! solo tienen boca para pedir anular ciertas prácticas de caza ancestrales y ahora protestan por la reciente ley de Castilla la Mancha en la que se expone: serán multados los que increpen o molesten a cazadores o espanten la caza con multa de 300 a 30.000 euros, si antes se hubieran comportado hoy esta ley no existiría , ellos la han confeccionado, abasallando entre varios cobardes a un solo cazador y desperdigándole los perros, ojala por fin saliera alguien a poner un poco de orden sobre este tema tan espinoso.
camión de bomberos en plena extinción

Si algún día un pirómano leyera este post por casualidad le rogaría que valorase los daños que provocará durante años con el corto tiempo de satisfacción que obtendrá, antes de encender una cerilla o un mechero.

Deja tu comentario, será bien recibido muchas gracias

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LOS INFILTRADOS DE LA CAZA POR MARÍA ÁNGELES MARCOS ALONSO




            

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